Salmo Capitulo # 1 (RVR60) SALMO 1 El justo y los pecadores 1 Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos, Ni estuvo en camino de pecadores, Ni en silla de escarnecedores se ha sentado; 2 Sino que en la ley de Jehová está su delicia, Y en su ley medita de día y de noche. 3 Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, Que da su fruto en su tiempo, Y su hoja no cae; Y todo lo que hace, prosperará. 4 No así los malos, Que son como el tamo que arrebata el viento. 5 Por tanto, no se levantarán los malos en el juicio, Ni los pecadores en la congregación de los justos. 6 Porque Jehová conoce el camino de los justos; Mas la senda de los malos perecerá.

Sunday, May 15, 2011

LA CAIDA DE LA SOBERBIA


Sal. 1; Sal. 49:6; Prov. 2:14; Is. 24:8; Mar. 10:23–25; Luc. 12:19; Rom. 1:30; 3:23, 27; 11:18; 1 Cor. 5:6; 13:6; 1 Tim. 6:17–19.

Con frecuencia hemos visto a un niño que anda contoneándose para lucir, ante quienes lo ven, su ropa nueva; y al tropezar y caer llora lo más fuerte que puede al ver su vestido sucio por la tierra o por el lodo del piso.
De parecida manera, Dios ha puesto en ti muchas gracias, muchas cualidades o virtudes y te ha concedido muchos dones. Puede ser que al pensar en estas cosas te jactes por ellas y desdeñes a quienes no las tienen, como lo hicieron Roboam y Nabucodonosor al pensar en su respectiva grandeza, y como ellos cayeron así también tú caigas. Y puede ser que cuando estés caído, en lugar de hacer alarde de lo que tenías y en lugar de jactarte por ello, te pongas a llorar como aquel niño imprudente: porque tu traje de muchos colores se ha ensuciado y se ha manchado en la caída.— Cawday, adaptación.
Lerı́n, A. 500 ilustraciones (1213).